La petrolera británica BP gana en el tercer trimestre la mitad que el año pasado y seguirá desinvirtiendo, pero parece empezar a adaptarse a un entorno de precios del crudo bajos. Entre julio y septiembre, la compañía tuvo un beneficio neto de 850 millones de euros respecto a los 1.800 de un año antes. Pero su estrategia de reducción de costes le está dando frutos porque, con un barril entre los cincuenta y los cincuenta y cinco dólares, espera mantener la rentabilidad.
ICYMI The key facts of #BPresults for 3Q 2016 https://t.co/exsXO9YKPP #BP $BP pic.twitter.com/mkQwGBSDpn— BP (@BP_plc) 1 de novembre de 2016
Algo que también le ocurre a la estadounidense Exxon Mobil y la británico-holandesa Shell. La primera publicó el viernes pasado unos beneficios en el tercer trimestre de 2.650 millones de euros, y la segunda anunció este mismo martes unas ganancias de 2.500 millones. En ambos casos, además, sus inversiones para este año y el que viene se sitúan por encima de las de BP.
Shell publishes Q3 2016 results – clean CCS earnings $2.8bn, up 18% from $2.4bn in Q3 2015. #ShellResults— Shell (Shell) 1 de novembre de 2016
Shell publishes Q3 2016 results – clean CCS earnings $2.8bn, up 18% from $2.4bn in Q3 2015. #ShellResults— Shell (Shell) 1 de novembre de 2016