Suena un teléfono en la Casa Blanca. Es del Pentágono. Su asistente pregunta a Barack Obama.
Entonces, el Premio Nobel de la Paz (Obama), asiente con la cabeza, y ordena: disparen. Más o menos así tuvo que ser la escena en Washington, (si es que no estaba en el Air Force 1), en la que se autorizó que el destructor USS Mason desplegado en el mar Rojo, lanzara misiles por primera vez contra territorio yemení.
Es la primera vez que EE.UU., ataca Yemen directamente. Los misiles lanzados por el destructor dejaron rostizadas las instalaciones del movimiento popular yemení Ansarolá. Se trataba de un sistema de radares lo que fue bombardeado. ¿Por qué lo hizo EE.UU.? Según Washington, sus barcos de guerra en esta semana fueron atacados por varios misiles que curiosamente no llegaron. Cayeron a unos metros de los navíos.
En respuesta, los estadounidenses decidieron lanzar sus armas, que según ellos lo hicieron para defenderse y no dejar que se extienda como virus, la violencia. Por su parte, el movimiento popular en Yemen, rechazó que ellos hayan lanzado un misil contra el barco de Estados Unidos. ¿Quién lanzó entonces el ataque fallido a EE.UU.?
¿Fue un invento de EE.UU.? ¿Fue real? ¿Por qué los susodichos misiles no llegaron al barco y se hundieron en el mar? Cual sea la verdad, lo que importa es que EE.UU. con su primer ataque mandó un mensaje no oculto, sino de frente: cualquiera que amenace a nuestra gente, nuestros barcos, tendrá que pagar.
‘Responderemos a la amenaza en el tiempo apropiado y de la manera apropiada’, argumenta Peter Cook, secretario de prensa del Pentágono. Entonces, ¿Los misiles lanzados y estas palabras, son más bien el mensaje?
Es así la primera vez que EE.UU. ataca directamente, aunque con lo que ha hecho en este año y medio de bombardeo saudí a Yemen, es como si el mismo atacara: sólo basta ver la inteligencia y tecnología que ofrece a los saudíes, los drones, y el suministro de gasolina a través de aviones cisternas en el aire, a los aviones bombarderos de Arabia Saudí, suministro de combustible sin el cual los saudíes no podrían atacar.
Para explicar todo es que este barco USS Mason, fue enviado para cuidar el mar Rojo, donde transita el 38% del tráfico marítimo de todo el mundo. Y una buena parte de la energía con la que el corazón de Europa funciona: petróleo y gas proveniente del Golfo Pérsico.
Hoy en ‘Detrás de la Razón’, ¿Por qué es tan importante Yemen, o atacar Yemen? ¿Por qué EE.UU. se ha convertido en el principal vendedor de armas de Arabia Saudí?
A pesar de estar cuidado el pacto de venta de armas a los saudíes por el Premio Nobel de la Paz, todo ha sido una gran mentira de promover la paz y extinguir la violencia de Obama, pues su Gobierno superó a todos los presidentes vendiendo la insuperable cantidad de: ciento quince mil millones de dólares, 115 000.000.000, de juguetes de la muerte, aviones caza, tanques, lanzadores de granada y equipo avanzado, a tan solo un país, Arabia Saudí.
Armamento que está usando para asesinar a los yemeníes. España hace lo suyo también, tan sólo en el primer cuarto del 2015 vendió a Arabia Saudí más de 447 millones de euros. Yemen, el gran negocio.
Detrás de la Razón pregunta, los analistas contestan y usted en su casa concluye. La realidad, hace lo que quiere, y nosotros volveremos a preguntar. Lo importante es detectar las aristas que no nos dicen. El análisis, las preguntas y respuestas a las nueve treinta de la noche, desde los estudios de Teherán; Londres, siete de la tarde, México y Colombia, una de la tarde; Madrid, ocho de la noche.