El refugiado sirio arrestado en Leipzig preparaba un ataque inminente. Es lo que piensa la policía alemana, que este lunes ha comparecido en rueda de prensa para confirmar la detención de Jaber Albakr. El joven, de 23 años, huyó el pasado sábado momentos antes de que las fuerzas del orden encontraran en su casa de Chemnizt explosivos similares a los empleados en los atentados de París y Bruselas.
“Su conducta indica vínculos con el grupo Estado Islámico”, explicaba el jefe de la Oficina de Investigación Criminal de Sajonia, Jörg Michaelis. “ Según la información que menejamos, Albakr buscó en internet cómo fabricar una bomba. Y tenía los materiales necesarios para hacerlo. Creemos que el explosivo estaba siendo terminado o, incluso, que estaba listo para usar”.
Albakr fue localizado gracias a la ayuda ciudadana. De hecho, lo denunciaron otros tres refugiados sirios que le conocieron a su llegada a Leipzig y que le dieron refugio hasta que descubrieron que estaba en búsqueda y captura. Además de Albakr han sido detenidas otras tres personas. La investigación aún no está cerrada.