El departamento del Petén está ubicado a unos 600 kilómetros al norte de la ciudad capital de Guatemala, es la cuna del imperio maya y una de las reservas naturales más importantes de Latinoamérica.
Únicamente después de la selva del amazonas la selva del Petén es considerada el segundo pulmón de América, su biodiversidad y riqueza selvática, sus maderas preciosas y su legado al mundo en cuanto a su cultura ancestral hacen de este territorio algo único en el mundo.
La selva de la biosfera maya se enfrenta a amenazas constantes y a pesar de todos los esfuerzos que se hacen para tratar de mantener los bosques del departamento del Petén a salvo de la deforestación y el mal uso de la tierra la lucha es intensa contra quienes trafican principalmente con maderas extraídas de árboles que tardan en crecer hasta 40 años, consideradas por su propiedades maderas preciosas, tal es el caso del rosul que en el mercado de Asia y Europa y Estados Unidos es valorada en cientos de dólares por metro.
Son miles de metros cúbicos los que se decomisan constantemente a contrabandistas de maderas preciosas, los puestos de control se observan a lo largo de las extensas carreteras del Petén, no obstante los guardabosques no son suficientes para cubrir un área que equivale a la mitad de Guatemala, la fiscalía de delitos contra el ambiente dice que se hace lo posible por enjuiciar a quien se sorprenda talando árboles de manera ilegal o deforestando área protegida para comercializar la madera o utilizar el terreno para otras actividades que representan pérdida de flora y fauna en áreas protegidas.
A pesar de los esfuerzos y la lucha constante contra la deforestación el balance sigue siendo negativo, el mercado negro de maderas preciosas de Guatemala es apetecida en el mundo y vulnera lo que es considerado el "corazón del mundo maya" en el país de la eterna primavera.
Miguel Salay, Ciudad de Guatemala.
