Desolación y tristeza en las calles de Amatrice. La localidad italiana, una de las zonas más afectadas por el terremoto, dejaba estas imágenes este viernes, al tiempo que un importante equipo de rescate sigue trabajando sin descanso para localizar víctimas y reubicar a los ciudadanos que han perdido sus casas.
“Afortunadamente, toda mi familia está a salvo. Mi hermana estuvo bajo los escombros durante horas, pero fue rescatada. Fue un milagro porque vive en el centro y su casa quedó totalmente destruida”, expresaba una mujer.
No solo Amatrice ha quedado devastada, con el centro histórico casi completamente derruido, sino que los pueblos y aldeas cercanas también han sufrido daños graves. El primer funeral ha tenido lugar este viernes en Roma.
“Empezaremos a trasladar a los fallecidos, los llevaremos a las morgues de los hospitales cercanos en Rieti y L’Aquila. Lo haremos cuando lleguen los otros equipos de rescate con las ambulancias”, decía un voluntario.
El Departamento de Protección Civil ha instalado tiendas de campaña y ha dispuesto gimnasios y otros centros con un total de 3.500 camas para las personas que se hayan quedado sin hogar tras el temblor.
Raquel García, euronews:
“Con el paso de las horas, el choque por las secuelas del seísmo se ha convertido en resignación entre las personas que, a pesar de que sus familiares se han salvado, lo han perdido todo. Otros esperan a la identificación de los cuerpos. Las morgues siguen recibiendo víctimas sin identificar”.
