Tres atentados, atribuidos al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), sacuden el este de Turquía con al menos 10 muertos y más de 250 heridos.
Cuatro miembros de las fuerzas de seguridad turcas han fallecido en dos ataques registrados en la provincia de Bitlis. Varios soldados han resultado heridos.
Horas antes, un ataque con coche bomba.en la ciudad de Elazig ha dejado tres muertos y más de un centenar de heridos.
La explosión, que ha tenido lugar en las proximidades de una comisaría de policía, ha causado asimismo grandes daños en los coches y los edificios cercanos.
La provincia de Elazig cuenta con una población mayoritaria no kurda y hasta ahora ha estado alejada de los combates entre las fuerzas turcas y los rebeldes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).
El primer atentado ha tenido lugar con un coche bomba, también contra una comisaría de policía, y ha acabado con la vida de tres personas, dos civiles y un policía, además de herir a más de 70 en la provincia de Van, unos 360 kilómetros más al este, cerca de la frontera con Irán. La policía ha detenido a un supuesto miembro del PKK, clasificado como organización terrorista por Turquía, la Unión Europea y Estados Unidos.