En un auto derecho que se da a sí mismo, EE.UU. publicó ya su reporte anual sobre el terrorismo, situando a Irán como el principal país patrocinador del terror en el mundo.
En un informe de cientos de páginas, Washington acusa a los iraníes de apoyar a grupos como el Movimiento de la Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), el Movimiento de la Resistencia Islámica Palestina (HAMAS), y otros grupos chiíes en Irak.
En otro punto del mismo reporte, presenta como la más grande amenaza para la humanidad al grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe). Estos datos son suficientes para analizar el famoso reporte del Departamento de Estado de Estados Unidos.
En primer lugar, no hay pruebas fehacientes para acusar a Irán de terrorista porque no hay evidencia de que organización estadounidense esté peleando con ese tránsito de apoyo o financiación al supuesto terrorismo.
Segundo, los grupos que son señalados buscan la reivindicación de sus derechos desde su identidad palestina o árabe, sometida a la invasión que hace el régimen de Israel en sus propios territorios.
Tercero, esos grupos están reconocidos por la propia sociedad de donde operan y son originarios. HAMAS en Palestina, y Hezbolá en El Líbano que hasta representación en el Parlamento tiene de ese país; así, con esto mismo la figura de grupo terrorista desaparece y cediendo pero sin conceder, aunque hubiese tal apoyo, la acusación sería falsa.
Cuarto, el reporte también pone al grupo terrorista de Daesh como una de las principales amenazas del mundo, pero no aplaude la lucha que el propio Irán está haciendo contra este grupo, esfuerzo reconocido por Irak y Siria, sus países vecinos.
Quinto, el territorio donde sucede más del 74 % de todos los actos terroristas, que alude el reporte y que es Irak, Afganistán, Paquistán, La India, Nigeria, junto con Siria, Irán no tiene relación ni acusación además de que los grupos que le imputan, tampoco están en ese territorio, lo cual echaría abajo el argumento contra el que fuera a priori, el país número uno como patrocinador del terrorismo: Irán.
Sexto, los patrocinadores reales o interesados, implicados en el apoyo al terrorismo no aparecen, que además son los aliados de EE.UU. Turquía que ha sido acusada desde su propio interior por periodistas silenciados y por cargamentos de petróleo robado por Daesh rumbo a territorio turco captado vía satélite por Rusia.
La financiación al terrorismo desde Arabia Saudí, Catar y demás países árabes acusada varias veces por la propia exsecretaria de Estado de EE.UU. Hillary Clinton, y la violación de los derechos humanos en la masacre que hace el régimen de Israel contra los palestinos, probada y comprobada no aparece.
¿En resumen, qué es el reporte, entonces, sobre terrorismo en el mundo que emite EE.UU.? ¿Cuál es la definición de terrorismo para EE.UU.? ¿Qué fin tiene ese reporte, para qué sirve, para menospreciar países? ¿Quién le dio el derecho a EE.UU. de calificar a los países del mundo, y decir quiénes son terroristas y quiénes no?
Detrás de la Razón con las preguntas: a las diez treinta de la noche, desde los estudios de Teherán; Londres, seis de la tarde; México y Colombia, doce del día; Madrid, ocho de la noche.
