El aeropuerto de Bruselas-Zaventem incrementará paulatinamente el número de vuelos a lo largo de la semana. Reabierto el domingo tras el atentado terrorista que sufrió el 22 de marzo, el recinto ha puesto en marcha nuevos procedimientos de check-in y estructuras temporales ante el aumento de vuelos.
“Los ataques han complicado los procedimientos, hay que respetar las medidas que ha adoptado el aeropuerto. Es lo mejor que pueden hacer”, dice un pasajero.
Para este martes hay previstos cerca de un centenar de vuelos, cifra que aumentará levemente el miércoles, aunque muy lejos aún de la capacidad habitual del aeropuesto, cifrada en 600.
“Hemos cruzado aparcamientos completamente vacíos que normalmente están llenos de gente. Hay policía y soldados en todas partes, eso nos da seguridad”, comenta otro hombre.
El aeródromo llevó a cabo un pequeño tributo a los fallecidos poco antes de su reabertura.
El atentado suicida fue seguido de otro en el metro bruselense, ambos perpetrados po