La inauguración del Salón Internacional de la Agricultura de París ha estado marcada este sábado por los abucheos y gritos pidiendo la dimisión del presidente francés François Hollande en la tradicional visita anual.
Tras asegurar que quería “escuchar” las quejas y mostrar la “solidaridad nacional” hacia la situación del sector, Hollande se comprometió ante el presidente de la federación nacional de los agricultores, Xavier Beulin, a reformar la ley de 2008 que regula los precios de las producciones agrícolas y a las grandes distribuidoras.
“Hace un año que hablamos con Hollande, pero él no escucha. Estamos muriendo en nuestras granjas. ¿Ha comprobado el número de agricultores que están muriendo en sus granjas? ¿Quién os alimenta a todos vosotros? ¿Quién lo hace? Mañana no habrá nadie para hacerlo. Nadie”, respondió un joven agricultor subido sobre una tarima.
El stand el Ministerio de Agricultura quedó completamente desmontado por los que protestaban mientras gritaban: “no somo
