Hace una semana Remedy anunciaba que el exclusivo de Xbox One no contaría con doblaje al castellano por su “naturaleza única” y porque se trata de un proyecto ambicioso que ha experimentado un desarrollo bastante agresivo. De este modo, Microsoft se ha cubierto las espaldas frente a la oleada de fans críticos, que no entienden la decisión de la compañía, especialmente tratándose de un juego de gran calibre y teniendo en cuenta que la otra joya de la corona, Alan Wake, sí que contó con traducción al castellano.