Históricamente el gobierno mexicano ha ignorado la presencia y aporte cultural de la comunidad afrodescendiente en su territorio. Un millón 380 mil personas están registrados en el primer censo poblacional de 2015, lo que equivale al 1.2 por ciento de la población total, pero puede ser mayor. Según la antropóloga e investigadora María Elisa Velázquez, México "es un país que tiene problemas serios de racismo, sobre todo porque no los asume". Reconocer ese tema, advierten académicos, es el primer paso para generar políticas públicas incluyentes con ese grupo étnico. teleSUR
