La reportera Amalia Pando y la radioemisora boliviana Erbol, están siendo acusadas por no haber interrumpido una entrevista en la que se emitían adjetivos contra la presidenta de la Cámara de Diputados, que el gobierno de Evo Morales califica como expresiones “racistas”.
La ley de lucha contra el racismo y la discriminación, vigente en el país desde hace cuatro años, establece que el medio de comunicación que publique o autorice ideas racistas y discriminatorias podría ser sancionado.
Gabriela Montaño, presidenta de la Cámara de Diputados, expresó su desaprobación contra el juicio de Pando, sin embargo considera que su medio ha utilizado las declaraciones para intentar deslegitimar el polémico "Caso terrorismo".
Frank Chávez, coordinador de la Asociación Nacional de Prensa (ANP) en Bolivia, señaló en el programa La Tarde de NTN24 que en el último año el gobierno de Evo Morales ha comenzado a realizar una persecución sistemática y organizada contra medios asociados a la ANP.
“Los medios informativos bolivianos están peleando por una independencia, porque su opinión sea libre, y su trabajo periodístico no sea objeto de ningún control del Estado”, añadió. Suscríbete para las ultimas noticias de tu pais: https://www.youtube.com/user/canalNTN24?sub_confirmation=1