Decenas de miles de personas se han manifestado, este lunes, delante del Parlamento japonés para mostrar su rechazo a la reforma de las Fuerzas Armadas.
La Cámara Alta aprobará casi con toda seguridad el paquete de leyes impulsado por el Gobierno que dará un giro radical a la política de defensa que ha caracterizado a Japón desde finales de la II Guerra Mundial.
La medida permitirá al Ejército defender a aliados si son objeto de un ataque o participar en operaciones de seguridad de Naciones Unidas.