El grupo Estado Islámico borra del mapa con explosivos una reliquia de la antigüedad.
La ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos asegura que los islamistas dinamitaron el Templo de Baal hace un mes en las ruinas de Palmira. Las informaciones habría sido confirmadas por residentes en la zona que han huído.
Los extremistas controlan Palmira y sus ruinas grecorromanas, incluidas en la lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, desde el pasado 20 mayo.
La destrucción del templo se conoce cinco días después de que el EI decapitara al antiguo responsable de los Museos en Palmira, Jaled al Asaad, quien habría ayudado a evacuar y esconder las piezas más valiosas de Palmira antes de que llegaran los islamistas, para ponerlas fuera de su alcance.