Grupos organizados de neozazis provocaran disturbios por segunda noche consecutiva en un centro de acogida en Heidenau, cerca de Dresde. Se enfrentaron de nuevo a la policía.
Cerca de 600 neonazis bloquearon el acceso al centro de acogida. La policía formón un cordón de protección para evitar el asalto al centro de refugiados recién inauugurado.
Contramanifestantes de izquierda se hicieron presentes en apoyo a los refugiados que llegaron el sábado en varios autobuses. Los defensores de los refugiados recibieron una lluvia de piedras, botellas y petardos de los manifestantes neonazis del Partido Nacionaldemócrata Alemán.