El balance de muertos en la explosión producida en una central de contenedores de Tianjin aumenta a 85, aunque esta cifra podría incluso aumentar.
El Gobierno del país ha comenzado una evacuación general de cualquiera que viva en un área de tres kilómetros a la redonda del lugar y la inspección de los almacenes de productos químicos peligrosos y explosivos en todo su territorio. Tras la tragedia del miércoles se publicó en un diario controlado por el Partido Comunista de China un artículo que cuestiona la planificación en materia de seguridad.
En los hospitales se acumulan los más de 700 heridos y los bomberos buscan a un número indeterminado de desaparecidos.
Por el momento no se han podido identificar los peligrosos productos químicos que explotaron en la terminal de contenedores, donde la policía cree que se almacenaba sobre todo nitrato de amonio, nitrato de potasio y carburo de calcio.
