Los palestinos han creado patrullas nocturnas para evitar nuevos ataques de colonos radicales en Cisjordania.
Al margen de las medidas que el Gobierno israelí anunció durante los últimos días y que aplica por primera vez a sus conciudadanos, como la polémica “detención administrativa” (sin necesidad de ser juzgado) o interrogatorios severos, los palestinos han establecido puestos de control improvisados para registrar vehículos y verifican la identidad de los que circulan por el territorio. “Comprobamos si tienen armas, si se ha producido algún robo… porque muchos judíos vienen aquí y crean problemas, queman casas…”, explica Muntasser, miembro de la patrulla de Turmusaya, un pueblo al norte de Ramallah.
El ataque, el pasado 31 de julio, contra una vivienda en Duma, al sur de Nablus, que provocó la muerte de Saad Dawabsheh y de su hijo de 18 meses, así como quemaduras de tercer grado a la madre y a un segundo hijo de la familia, ha obligado tanto al Ejecutivo como a la sociedad isra