Si se firma el acuerdo con Irán, se habrá logrado arrodillar a los iraníes, suenan algunas voces. Otras dicen que en realidad los iraníes arrodillaron a Obama.
Hoy no nos importa si estas frases son verdad, porque lo que el mundo sabe y aplaude, es que Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) hayan logrado un resultado conjunto, que acercará más a la paz al mundo, que cualquiera otra resolución.
Hoy lo que nos importa es por qué se dicen esas frases. Por qué se usan y para qué se usan. Y sobre todo analizar, cómo entonces queda la relación entre Irán y EE.UU. después de la gran resolución histórica que alcanzaron en Viena la capital austriaca, con el Sexteto.
Por qué también se cruzan las declaraciones temerarias y osadas, como la de secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que aunque critica y dice que es un error, habla de un ataque del régimen de Israel a Irán.
Por otra parte, la del secretario de Defensa de EE.UU., Ashton Carter, que asegura que la opción de un ataque militar a Irán aún no ha desaparecido. ¿Qué intención se mueve detrás de todo esto?
