Desarmar a los grupos armados ilegales en Ucrania. Esa fue la petición que el presidente del país, Petró Poroshenko, hizo a las fuerzas de seguridad tras la muerte de cuatro personas durante un tiroteo, el fin de semana, en la ciudad oriental de Mukáchevo entre la policía y miembros de la organización radical militarizada Pravi Sektor (Sector de Derechas).
“Es un descrédito para los patriotas ucranianos. Ninguna organización política tiene derecho a crear grupos armados”, dijo Poroshenko.
Ante los hechos, Eslovaquia y Hungría reforzaron la seguridad en sus fronteras.
La organización, formada durante el Maidán y que también se enfrentó a empresarios localesen Mukáchevo, alegó que combate el contrabando en esa región a los pies de los Cárpatos.