El papa Francisco oficia una misa ante alrededor de dos millones de fieles en Bolivia

2015-07-09 23

La visita del papa Francisco a Bolivia estuvo marcada por el momento en el que el presidente del país, Evo Morales, le hace entrega de un crucifijo tallado sobre una hoz y un martillo en el palacio presidencial. La “cruz comunista”, como se la ha bautizado en los medios, es una réplica de una figura tallada por el sacerdote jesuita español Luis Espinal Camps, que fue torturado y asesinado por paramilitares en La Paz en 1980 por denunciar la violencia política en el país. Posteriormente, el sumo pontífice realizó una misa ante alrededor de dos millones de personas en el parque del Cristo Redentor, en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.

“Una lógica que busca transformar todo en objeto de cambio, todo en objeto de consumo, todo negociable, una logica que pretende dejar espacio a muy pocos, descartando a todos aquellos que no producen. Y Jesús, una vez más, vuelve a hablarnos y nos dice: ‘No, no, no es necesario excluirlos, no es necesario que se vayan, denles ustedes de comer’”, expre