Primera visita de un sumo pontífice a Ecuador en más de 30 años y segunda de la historia. Tres décadas después del paso de Juan Pablo II, el papa Francisco se ha desplazado a Guayaquil y Quito, donde se ha reunido con el presidente Rafael Correa en el palacio de Carondelet.
Tras el encuentro, Jorge Bergoglio se dirigió a pie, saludando a los fieles, a la catedral de la capital, donde pidió el fin de las diferencias y exclusiones. “Les voy a dar la bendición para cada uno de ustedes y para sus familias para todos los seres queridos y para este gran y noble pueblo ecuatoriano”, dijo.
#EcuadorTeAbraza: Así luce el Parque Samanes en #Guayaquil donde miles de fieles esperan al Papa Francisco. pic.twitter.com/FXlOBJnX10— Noticias EcuadorTV (@noticiasecuador) July 6, 2015
Antes, en Guayaquil, donde aterrizó a su llegada al país, el Papa había dado una misa en el parque de los Samanes ante 800.000 personas. En la ceremonia defendió las ayudas sociales a las familias, pilares básicos