La policía tunecina detiene a 12 personas por su supuesta relación con la matanza que el pasado viernes acabó con la vida de 38 turistas extranjeros, 30 de ellos británicos. El ataque, cuya autoría asume el grupo Estado Islámico, se produjo en la playa de Susa, en el exterior del hotel Imperial Marhaba.
“Unidades de seguridad lograron descubrir y destruir la red que estaba detrás de la operación”, dijo el ministro tunecino de Relaciones Constitucionales y Sociedad Civil, Kamel Yendubi.
Asimismo, Yendubi anunció que alrededor de 120 personas fueron detenidas en los últimos días en el país por sus presuntos vínculos con el salafismo y el yihadismo.
Mientras tanto, cerca de 1.400 agentes se sumaron al dispositivo de seguridad operativo en zonas turísticas y de playa.
La policía tunecina busca, además, a otros dos hombres que podrían haber recibido entrenamiento militar en Libia junto con los autores materiales del ataque al Museo del Bardo del pasado marzo, en el que fallecieron 21
