Tras diez días de intensas protestas en Ereván, la capital de Armenia, este lunes las calles permanecen tranquilas. Los ciudadanos se han manifestado contra los aumentos intempestivos a los servicios públicos que anunció el gobierno. Los precios de la energía se incrementaron en 16 por ciento. Centenares de manifestantes fueron dispersados violentamente por las fuerzas policales en días pasados. teleSUR