El opositor ruso Alexéi Navalni ha escapado a la cárcel. La justicia rusa ha rechazado la petición de cinco años de prisión que pedía la fiscalía, por haber violado la libertad condicional en un caso de corrupción por el que había sido juzgado y condenado. Tras pasar un año en arresto domiciliario, el pasado febrero fue detenido en el metro de Moscú por llamar a los ciudadanos a participar en una “marcha anticrisis”.