El anterior presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, no obligó a dimitir al antiguo comisario europeo de Sanidad y Consumo John Dalli. Es lo que ha concluido el Tribunal General de la Unión Europea, que entiende que el político maltés renunció a su cargo en 2012 de forma voluntaria. Una renuncia que se produjo después de que la Oficina Antifraude de la UE enviara un informe a Barroso que concluía que Dalli tuvo encuentros confidenciales y no oficiales en varias ocasiones con representantes de la industria tabacalera.
Pero según el antiguo comisario esta investigación no tenía ningún fundamento y aseguró también que Barroso le pidió que dimitiese. La corte comunitaria, con sede en Luxemburgo, ha renunciado el recurso de Dalli. La nueva Comisión Europea apuesta por más transparencia y por hacer públicas las reuniones que mantiene su gabinete con los grupos de presión y otras organizaciones.