Madrid, 21 abr (efesalud.com). La doctora Pilar Martín Vaquero, endocrinóloga de la Clínica d-médical de Madrid, nos sienta a su mesa repleta de cereales nutritivos y apetitosos para demostrarnos que el pan, alimento básico del ser humano desde la prehistoria, es más sano y robustece menos que la mayoría de las galletas que se pueden adquirir en cualquier supermercado.
"He cogido 100 gramos de galletas María, 100 gramos de galletas que por la marca indican que son digestivas, 100 gramos de galletas elaboradas con mantequilla, 100 gramos de galletas untadas con chocolate y 100 gramos de pan, y he comparado sus valores nutricionales", nos plantea a modo de prueba empírica o competición deportiva.
La comparativa ofrece los siguientes resultados:
En cuanto a su valor energético, todas las galletas se posicionan entre las 450 y las 485 kilocalorías, mientras que el pan solo aporta 236, alrededor de la mitad de calorías que sus selectas hermanas de cereal.
En cuanto a la contribución de agua, esencial para la vida, las galletas sacian la sed corporal con apenas un 2,5% de su contenido, por un 35% del pan.
En cuanto a los hidratos de carbono, al ser alimentos que se elaboran con harina de trigo, "resulta de máxima importancia fijar la atención en sus componentes azucarados, ya que no es conveniente para la salud un alto contenido en azúcares simples", indica.
Las galletas van desde los 13 gramos de las "digestivas" hasta los 34 de las chocolateadas, pasando por los 25 y 26 de las mantequilleras y las María, respectivamente. En cambio, el pan solo nos endulza con 1,8 gramos.
En cuanto a la fibra, el pan, con 3,5 gramos, solo pierde con los 4,5 de las "digestivas", una diferencia mínima que disminuye aún más con el resto de galletas.
En cuanto a las proteínas, mérito dietético que no caracteriza a estos productos horneados, todos giran entre los 6,3 y los 8,3 gramos, aunque es el pan el que más se apunta.
En cuanto a las grasas totales, las galletas triunfan sin lugar a la duda: 19 gramos las María, casi 21 las "digestivas", 20 las de mantequilla y 24 las más atrayentes para los niños. El pan, con unos pírricos 1,6 gramos, vuelve a salir airoso.
Pero en este punto hay que marcar los detalles de la lista.
Es el colesterol donde tenemos que fijar la mirada para proteger nuestro futuro. Quien se lleva la peor parte son las galletas con mantequilla con 107 miligramos, seguidas por los 41 de las "supuestamente digestivas"; además, las María, 2... las de 'choco', 15... y el pan, un rosco digital.
Por tanto, el pan tiene menos calorías, menos azúcares simples de fácil absorción, apenas tiene grasas, está libre de colesterol, añade más proteínas a nuestro cuerpo y colabora a su elasticidad con mucha agua.
Corolario que dejá atrás la demonización del pan, un alimento que "gana por goleada nutricional a las galletas", concluye la endocrinóloga Pilar Martín, y por eso nos indica que lo consumamos con normalidad, al estilo d-médical de la salud.
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