Parece difícil pensar que el nivel de riqueza de las personas pudiese influir en el uso que se hace o no de un red social. Sin embargo un estudio ha desvelado que los jóvenes de las familias más pudientes prefieren Instagram y Snapchat a Facebook. Según los autores de estudio, los jóvenes estadounidenses residentes en hogares con unos ingresos inferiores a 50.000 dólares anuales, usan principalmente Facebook. En concreto, un 49% de afirman que es la red social favorita.