Trabajadores brasileños rechazan lo que se ha dado la tercerización en los empleos que empresarios del país practican, pues limitan y en algunas ocasiones violan los derechos de los empleados. Miles de ciudadanos buscan frenar ese tipo de modo de generación de trabajos, así como la reforma política que permita frenar actos de corrupción. Sectores vinculados a la derecha aprovechan la coyuntura para de igual forma manifestarse en contra del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff, lo cual propicia la polarización social. teleSUR