Un juez de Texas pensó que estaba exento de la ley, pidiendo a los oficiales de policía que lo dejaran irse luego de ser sorprendido manejando en estado de embriaguez.
Alrededor de las 1am., Nora Longoria, de 49 años de edad, estaba camino a casa después de la cena, cuando un oficial de policía de McAllen la detuvo por exceso de velocidad.
Según el informe policial, los agentes olieron alcohol y notaron a Longoria teniendo problemas para hablar. Ella falló la prueba de sobriedad y se negó a permitir que los oficiales la arrestaran hasta que la amenazaron con cargos adicionales.
"Usted va a arruinar mi vida. He trabajado duro durante 25 años para estar donde estoy hoy ", dijo la mujer.
Longoria confesó a los agentes que había consumido cinco cervezas esa noche mientras cenaba con amigos, ella se negó a realizar una prueba con el alcoholímetro.
Longoria fue acusada de conducir en estado de ebriedad y fue puesta en libertad la madrugada del domingo bajo fianza.
