El tricampeón de NASCAR Tony Stewart atropello y mató al piloto de sprint-car, Kevin Ward, de 20 años de edad, durante una competencia en la pista de tierra en Nueva York el sábado pasado.
El altercado comenzó cuando Stewart empujó a Ward contra la pared en la vuelta 14 de 25, un neumático de Ward termino pinchado después de dar un giro y medio producto del contacto. Oficiales de la carrera ondearon la bandera de precaución, advirtiendo a los conductores a reducir la velocidad a 40 millas por hora.
En lugar de esperar a los comisarios de carrera, Ward salió de su vehículo para hacer frente a Stewart. Mientras se burlaba de Stewart, Ward fue golpeado por el neumático trasero derecho de Stewart, siendo lanzado a casi unos 25 pies del lugar del impacto.
Los sprint-car están diseñados con un ala superior que ayudan a estabilizar el auto en las curvas. En consecuencia, el ala superior dificulta la visión del conductor. Ward vestía de negro, por lo que es una exageración decir que Stewart es totalmente responsable. Aunque, aparentemente Stewart acelero momentos antes del accidente.
Un competidor defendió a Stewart en Facebook diciendo que el conductor del coche 45 vio a Ward en el último segundo y apenas lo logro esquivar, y señaló que Stewart tuvo aún menos tiempo para reaccionar.
Los paramédicos trasladaron a Ward al Thompson Hospital, donde fue declarado muerto 45 minutos después del accidente.
Stewart decidió no competir en la competencia Cheez-It 355 de la Copa Sprint de NASCAR el pasado domingo.