El presidente ruso, Vladímir Putin, firmó este lunes el decreto por el que levanta la prohibición de suministrar sistemas de misiles antiaéreos S-300 a Irán. Esta prohibición estaba vigente desde 2010.
Rusia confimó que exigirá el levantamiento del embargo internacional de armas a Teherán una vez se firme el acuerdo nuclear con Irán a finales del próximo mes de junio.
Los S-300 son similares a los Patriot estadounidenses y son capaces de seguir y abatir varios blancos simultáneamente a alturas de hasta 27 kilómetros, con un alcance de hasta 200 kilómetros.
La sociedad iraní espera que el fin del embargo pueda en último término ayudar a salir del estancamiento a la economía. Occidente por su parte podría cerrar tres décadas de hostilidades con la potencia regional, clave para estabilizar en un futuro Oriente Medio.
