Las exportaciones vuelven a aumentar en Alemania, aunque las importaciones todavía lo hacen más. Tras un mes de enero a la baja, las exportaciones alemanas se incrementaron en febrero un uno y medio por ciento según la Oficina Federal de Estadísticas. Por su parte, las importaciones subieron un 1,8. Es más de lo que se esperaban los analistas, con lo se pone en duda la capacidad de la primera economía de la eurozona a apoyar su crecimiento sobre sus ventas al extranjero. El superávit comercial germano se mantiene en torno a los veinte mil millones de euros.
Otro elemento de incertidumbre es la producción industrial. En febrero, esta aumentó ligeramente después de un retroceso en enero. Mientras que los pedidos siguen a la baja desde principios de año. El sector manufacturero alemán parece no acabar de arrancar en 2015.