En una ofensiva conjunta con el brazo sirio de Al Qaeda, el Frente al Nusra, los yihadistas atacaron el campo de Yarmuk el miércoles y controlan ya el 90 por ciento de su superficie. El grupo Estado Islámico se encuentra a unos 7 kilómetros al sur de Damasco.
El presidente palestino ha explicado que la OLP en Damasco ha formado una célula de crisis para gestionar la tragedia y tratar de solucionarla con el menor número de bajas posible. “Estamos en contacto con nuestros hermanos allí para encontrar una salida y proteger a nuestro pueblo de esta tragedia”, dice Mahmud Abás.
Según Naciones Unidas, hasta 18.000 civiles podrían encontrarse aún en Yarmuk, muchos de ellos menores. Unas 2.000 personas habrían conseguido escapar este fin de semana del campo de refugiados, donde rebeldes sirios y milicianos palestinos combaten por tierra al grupo Estado Islámico. El Ejército sirio lo hace desde el aire, lanzando barriles explosivos.