Esta joven cadete rusa es capaz de desmontar y volver a armar un AK-47 a la velocidad de la luz.
Viendo la precisión y rapidez con la que ejecuta la operación parece un juego de niños, pero se trata de una habilidad reservada a las futuras élites rusas.
Teniente Coronel Alexander Dmitriev, Servicio Federal de Seguridad: "El estado siempre se ha encargado de educar a una generación de líderes competentes, gente competente capaz de server a la madre patria en el futuro."
Teniente Coronel Alexander Dmitriev, Servicio Federal de Seguridad: "Si se unen al ejército será Bueno, si se convierten en funcionarios será aún mejor. En cualquier caso, es la élite de nuestra sociedad”
A estos jóvenes cadetes se les entrena con una educación del más alto nivel, y pueden acceder más fácilmente a las academias militares y diplomáticas que forjan a los líderes de Rusia.
Este año desfilarán ante Putin en las celebraciones que conmemoran el fin de la Segunda Guerra Mundial.