El drama de las hipotecas suscritas en francos suizos amenaza ya a miles de familias de Europa del Este. El deshaucio de los bancos planea sobre estas familias, que se ven incapaces de afrontar unos pagos mensuales que se disparan desde que el franco suizo ha dejado de emparejarse al euro y se ha apreciado considerablemente. En el momento de suscribirse, estos préstamos se contrataban al 3,5% respecto al 8% que suponían si se hacían en euros.
En Rumanía, se han contabilizado 75.000 casos en estas circunstancias. Daniela Gornea y su marido economista, con dos hijas, no se ganan mal la vida. Pero no lo suficiente para la actual situación.
“Creo que la voy a perder, no tengo otra opción”, explica Daniela sobre su vivienda en el sur de Bucarest. “Un pago de 740 francos suizos quiere decir 3.700 o 3.800 leu rumanos para unos ingresos de 4.000. No puedo hacer ningún otro plan y está claro que voy a perder la casa”.
El banco central de Rumanía ha descartado obligar a las entidades finan