El reciente asesinato del periodista Moisés Sánchez Cerezo será uno de los casos por los que el Comité de Naciones Unidas contra las Desapariciones Forzadas, indagará al Gobierno mexicano durante la comparecencia que se está celebrando este 2 y 3 de febrero en Ginebra.
El pasado 2 de enero el periodista del estado de Veracruz fue sacado de su vivienda por hombres armados que se llevaron su ordenador y otro material de trabajo. Su muerte, se suma a la de otros 97 periodistas que perdieron la vida en México, entre 2010 y 2015. La compleja situación a la que se enfrenta el país, hace que el ejercicio informativo sea de alto riesgo en el país.
Por otra parte, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) mexicana ha documentado otras 433 quejas por agresiones, en el mismo período, contra profesionales de las comunicaciones.
Han destacado que, en el pronunciamiento de esta institución, se hace un serio llamado al Gobierno de Peña Nieto para que garantice los derechos humanos de los profesionales que cumplen con el rol de informar. Además, de 2005 a la fecha, se han registrado las desapariciones de 22 comunicadores y 42 atentados en contra de sedes de medios de comunicación.
El riego que está profesión conlleva, para el ejercicio de la libertad de expresión, implica una reducción de las garantías a periodistas y medios de comunicación e impiden su ejercicio profesional de cara a la ciudadanía.
INVITADOS:
Armando González, Corresponsal de La Jornada de México
Marta Gómez-Rudolfo, Corresponsal en España para diferentes medios mexicanos
