Cada enero, en la ciudad China de Harbin, se realiza el mítico festival de esculturas de hielo y nieve que convoca a locales y visitantes de todo el mundo. Las estatuas y esculturas imponentes con luces de LED o velas en su interior para que la refracción de la luz imprima colores que al fundirse con el hielo, convierten a este pueblo en un lugar de una belleza inigualable. Simplemente bello.