Han pasado más de dos días y todos los indicios apuntan a que la cifra de muertos en el ferri que ardió la madrugada del pasado domingo en el mar Adriático pueda aumentar. Los últimos en sumarse a la macabra lista han sido dos personas que ayudaban en un remolcador albano a asegurar los restos del barco siniestrado. A ellos se suman diez víctimas que viajaban en el interior del navío.
Y, como asegura el fiscal de Bari, es probable que haya más. “No tenemos ninguna duda de que había inmigrantes en situación ilegal a bordo. Probablemente estaban esconidos en la bodega. Tememos que al examinar los restos, encontremos más cuerpos.”
El ‘Norman Atlantic’ ardió cuando realizaba la ruta la ciudad griega de Patras y la localidad italiana de Ancona. Cuarenta y tres supervivientes, entre los que hay siete niños han sido trasladados en un avión militar desde Bari hasta Atenas. Los equipos de salvamento rescataron a 427 personas que viajaban a bordo.