Los simpatizantes de San Lorenzo, entre la decepción y el reconocimiento

2014-12-21 644

Buenos Aires, 20 dic (EFE), (Imagen: Aitor De Iturria).- Cuando el árbitro guatemalteco Walter López Castellanos marcó el final del partido las lágrimas y los cánticos fueron un denominador común en los simpatizantes de San Lorenzo que se dieron cita en la mítica intersección de las avenidas San Juan y Boedo, en el centro de la ciudad de Buenos Aires.

Esa emoción que sintetizó la euforia y la algarabía de haber disputado la final del Mundial de Clubes junto con la decepción y el lamento por haberla perdido ante un Real Madrid implacable.

Apenas pasado el mediodía en el histórico lugar de reuniones de los simpatizantes de San Lorenzo, los colores azul y rojo fueron brindándole un marco de final al mítico barrio porteño de Boedo.

Tanto en esta esquina como en el bufete del estadio, ubicado en el Bajo Flores, la ilusión de poder conseguir un triunfo histórico marcó la antesala de la final.

Como sucedía con aquellos que habían recorrido 9.061 kilómetros hasta Marrakech, los cánti