El Black Friday tuvo este año un tono más negro que lo que marca la costumbre. En pleno centro de Manhattan la protesta Apaga el viernes negro llegó a la puerta de varios grandes almacenes.
Además por tercer año consecutivo los empleados de Walmart, la mayor cadena de almacenes de Estados Unidos, planean huelgas y protestas. Reclaman aumentos salariales y mejores horarios.
Sergio Uzurin, uno de los manifestantes, explicó: “Estamos aquí el día de mayor actividad comercial del año en uno de los mayores centros comerciales del mundo para recordarle a la gente que la vida está antes que el beneficio económico. Sin vida no hay beneficio posible”.
En Brentwood, cerca de Ferguson, en Misuri, decenas de indignados por la no imputación del policía que mató a Michael Brown expresaron su repulsa al grito de “¡Manos en alto, no disparen!”.
