¿Estudiar el funcionamiento del cerebro puede mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje? ¿Y puede ayudar a estudiantes con trastornos de atención? Exploramos la relación entre neurociencias y educación en World Learning.
EE.UU: Ondas cerebrales
Los profesores de la Universidad de Columbia en Nueva York, fundada en 1887, tienen una tradición de innovación en la enseñanza.
La Doctora Froud y sus colegas estudian la actividad eléctrica del cerebro, e investigan cómo los seres humanos aprendemos a hablar un nuevo idioma.
¿Por qué los interlocutores extranjeros no pronuncian los sonidos de una lengua con tanta facilidad como los nativos? ¿La dificultad de pronunciación estriba en cómo el oído percibe sonidos o en cómo los descifra el cerebro?
Los especialistas han observado que en la percepción de los sonidos hay un intervalo de un cuarto de segundo al comparar la actividad neurológica de hablantes nativos y no nativos.
La doctora Karen Froud, jefa del departamento de Neurocognición en el Laboratorio de Idiomas de la Universidad de Columbia, asegura que: “En realidad no es un problema de producción de los sonidos, sino de percepción de los mismos. Podemos observarlo a nivel cerebral.
Los alumnos de la doctora Froud proceden de diversas disciplinas. Amira Mandelbaum se dedica a la pedagogía terapéutica en una escuela infantil.
“Entiendo mejor lo que les pasa a algunos niños. Observé su comportamiento, pero para mí era muy difícil entender lo que ocurría en su cerebro, lo que experimentan los niños autistas. Y creo que al comprender que a veces necesitan más oxígeno en su cerebro, ahora podría ayudarles con la respiración profunda y echarles una mano para regular un poco su sistema.”
Grace Chung quiere trabajar en el aprendizaje de personas que han sufrido apoplejía.
Al estudiar el cerebro, creo que sabré mejor en qué parte de éste se presentan los problemas de cada paciente. Se puede comparar con el trabajo de un fisioterapéuta que trabaja con los músculos. Para mí es algo similar, si sé qué parte del cerebro está causando el problema, puedo focalizar mejor mi terapia.
Este tipo de investigación esta aún en una fase teórica. Sin embargo, pone de relieve que toda actividad de aprendizaje produce modificaciones en el cerebro.
Según la doctora Froud: “Para los alumnos poder abordar estas cuestiones es muy emocionante, pues saben que podrán tener un impacto en su labor.”
Canadá: Reconciliarse con la hiperactividad
Todos tenemos a veces problemas para concentrarnos. Pero son las personas con Transtorno de déficit de atención por hiperactividad o (TDAH) las que enfrentan este problema como un desafío cotidiano.
Veamos cómo la neurociencia intenta ayudarles en este reportaje desde Canadá.
Roseline tiene 10 años y Gabriel 14. Ambos tienen transtorno de déficit de atención por hiperactividad. Los niños que padecen este trastorno neurológico tienen muchos problemas en sus actividades escolares. Escuchar al profesor, concentrarse en un ejercicio, e incluso permanecer sentados son desafíos cotidianos para ellos.
“Para mí es más difícil estar concentrado en clase, dice Gabriel. Desde el principio me dan ganas de moverme tengo ganas de salir a desfogarme.”
Los dos chicos requieren mucha atención en casa. Los padres de Gabriel deben seguir una rutina rigurosa para asegurarse de que hace los deberes.
La madre de estos chicos, Annie Parenteau es logopeda y se preocupa mucho por los deberes de sus hijos: “Establecemos calendario de tareas escolares. Vemos con el colegio qué tiene que hacer para las próximas semanas y para todo el mes. Vemos cada semana en la agenda. Entonces ponemos los deberes que hay que hacer a corto y a largo plazo; y cada tarde tiene un tiempo preciso para cada tarea.”
Para ayudar a la familia está un neuropsicólogo experto en las diferentes zonas del cerebro y en procesos de aprendizaje. Benoît Hammarrenger se reúne periodicamente con los padres y los profesores para darles consejos:
“Pueden usar por ejemplo una pelota anti-estrés, con ella los chicos ejercitan los músculos de la mano, lo que estimula su atención, la misma función tienen unas bandas elásticas que fijadas a las patas de la silla, permiten al niño ejercitar sus piernas y también su cerebro.”
A nivel mundial, entre un 5% y un 7% de los niños sufre este trastorno de difícil tratamiento. Lo principal es un diagnóstico correcto.
“El Ritalin y otros medicamentos son adecuados cuando se ha detectado un trastorno específico, asegura el Doctor Hammarrenger. Todo parte de una buena evaluación. Si estamos seguros de haber hecho el diagnóstico adecuado, y que se trata de un transtorno de orden neurológico, entonces la medicación es la solución a nuestro alcance.”
Existen sin embargo otras vías para tratar este problema. CerebroGym, es un juego educativo que potencia la capacidad de atención y ayuda a controlar la impulsividad. Caroline Julien, de la productora Creo, explica de qué se trata: “Consiste en actividad