Cuando alguien sufre un infarto necesita asistencia sanitaria inmediata. Pero en ocasiones, las ambulancias, llegan demasiado tarde.
Una ambulancia dron podría ser la solución. Se desplaza a una velocidad diez veces superior a la de una ambulancia tradicional y posee su propio desfibrilador que una persona que acompañe al paciente puede utilizar gracias a la asistencia telefónica de un profesional.
El joven holandés Alec Momont asegura que la clave de su éxito es la velocidad.
“Uno de los límites más importantes de los drones es su batería. Pero desde que son capaces de volar tan rápido, llegar al lugar elegido tan rápido y aterrizar, esto ya no es un problema porque utilizamos apenas un 5% de la batería. Por esta misma razón pueden volar a una velocidad superior porque hay más batería disponible”, explica Momont.
Por el momento se trata apenas de un prototipo. Pero mientras se llevan a cabo más pruebas, Momont espera que su dron ambulancia pueda ser comercializado en cinco años.
Un dron portátil podría revolucionar el mundo de los selfis, asegura un grupo de diseñadores de la Universidad de Standford, California.
Se trata de una pulsera que se convierte en un dron equipado con una cámara. Apretando un botón el dron se libera de la pulsera. Después, gracias a varios sensores, el aparato puede seguir los movimientos de la persona a la que debe fotografiar o sobre la que debe realizar un video. Al final de la operación, el dron vuelve hacia su dueño como si se tratase de un bumerán.