A 33 días de que la Procuraduría General de la República (PGR) atrajo el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, se presentó en conferencia de prensa una reconstrucción de hechos con testimonios de personas implicadas.
El procurador Jesús Murillo Karam señaló que en 33 días no se ha dejado una sola acción de búsqueda de los estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa.
De acuerdo con la reconstrucción de hechos los estudiantes que sobrevivieron al ataque ordenado por José Luis Abarca la noche del 26 de septiembre fueron llevados a una brecha ubicada entre Iguala y Cocula donde fueron entregados al grupo de Guerreros Unidos.
De acuerdo con los testimonios de los implicados, al menos 15 de las personas trasladadas en camionetas de carga murieron en el camino. Al llegar a las inmediaciones del basurero de Cocula, los sobrevivientes bajaron a los muertos para luego ser interrogados para saber de quienes se trataban.
Implicados en el caso dijeron a la PGR que los arrojaron a todos a la parte baja del basurero para prenderles fuego. El fuego duró desde la medianoche hasta las 14 horas del 27 de septiembre pues se arrojó diesel, llantas, botellas. Después de las 17 horas del 27 de septiembre los implicados en el caso recibieron la orden de fracturar el resto de los huesos calcinados para luego depositarlos en bolsas negras y esparcirlas en el río San Juan. Algunas fueron arrojadas enteras.