Rusia, Ucrania y la Unión Europea han conseguido firmar un acuerdo provisional en Bruselas para que el gas vuelva a transitar por los conductos ucranianos.
El pacto, alcanzado tras dos días de negociaciones, pone fin a cinco meses de contencioso entre Kiev y Moscú provocados por la deuda ucraniana con el gigante ruso Gazprom.
“Hemos tomado una decisión transitoria, unos acuerdos preliminares que se aplicarán hasta que se resuelva el conflicto gasístico con Rusia, que será tratado en un tribunal de arbitraje en Estocolmo”, declaraba el ministro ucraniano de Energía, Yuriy Prodan.
“En muchos aspectos, hemos llegado a un compromiso en lo que se refiere al precio y a la estructuración de la deuda. Esa es nuestra contribución al acuerdo para que la situación en Ucrania se estabilice y que en otoño e invierno el suministro de los consumidores europeos también sea estable”, añadía su homólogo ruso, Alexander Novak.
El acuerdo estipula que Kiev saldará en dos pagos la deuda de casi 2.500 millones de euros. Los rusos aseguran que el total del impago es de 4.200 pero aceptan dirimir el asunto en un tribunal de arbitraje. El segundo punto importante del pacto es el precio, que según lo acordado calcula 1.000 m3 de gas a un precio inferior a los 305 euros hasta marzo de 2015. Kiev tendrá que pagar el suministro cada mes y por adelantado.
