Representantes de una treintena de Estados se reúnen en Berlín para buscar respuestas a esta pregunta en la Conferencia sobre Siria.
Más de tres millones de sirios han cruzado las fronteras huyendo de la violencia. Jordania, el Líbano y Turquía son los países más afectados por la afluencia de inmigrantes.
El jefe de la diplomacia alemana Frank-Walter Steinmeier ha alertado de que estos países se encuentran desbordados.
“Nos estamos acercando a un punto de agotamiento en el que se está poniendo a prueba nuestra capacidad para dar respuesta a las necesidades de los refugiados sirios”, advierte el ministro jordano de Exteriores Nasser Judeh.
Jordania da cobijo a más de 600.000 refugiados registrados. En el Líbano la cifra supera el millón, lo que supone un crecimiento poblacional de casi un tercio.
“A pesar de la existencia de campamentos improvisados, el 85 por ciento de los sirios residen en viviendas de pueblos o ciudades. Muchos han montado pequeños comercios, panaderías, tiendas de comestibles. Han florecido tiendas de todo tipo sin permisos o licencias, y a veces suponen competencia desleal para los comerciantes libaneses”, explica el primer ministro libanés Tamam Salam.
Berlín ha pedido mayor solidaridad internacional para hacer frente a la peor crisis humanitaria a la que se enfrenta el mundo en la actualidad. La llegada del invierno convierte en más dramática la situación de los refugiados.
