El Reino Unido no pagará su cuota a la UE, al menos no el 1 de diciembre. David Cameron marca perfil euroescéptico en el Parlamento Británico y explica su reacción de la última cumbre en Bruselas, celebrada el jueves y el viernes. Cameron mandó parar la reunión porque no quería pagar los 2.000 millones de euros que le pide Bruselas en 2014. El método de cálculo empleado es el mismo de siempre y está ligado al crecimiento económico.
“La Unión Europea tiene que cambiar, tiene que recuperar la confianza eso empieza por entender y respetar que esos pagos y ajustes se cubren con el dinero de impuestos duramente ganado por sus ciudadanos”, ha dicho Cameron. “Es sólo uno de los muchos retosen nuestra larga campaña para reformar la Unión Europea pero es vital que insistamos en esa tarea”.
Estos 2.000 millones de euros adicionales tienen su origen en el nuevo método de cálculo del PIB de los estados-miembros. Ahora se incluyen sectores como la investigación y el desarrollo o sectores de la economía sumergida como la prostitución y el tráfico de drogas. La nueva contabilidad aumenta la última predicción de crecimiento de Europa en un 2,5%.
Italia deberá pagar 300 millones más de lo previsto.
En principio la fecha límite de ese pago es el 1 de diciembre, aunque las cifras definitivas no estarán hasta 2015.