El presidente ucraniano ha hecho una visita sorpresa a los soldados que se encuentran en el este del país. Una muestra de apoyo en el que es un día crucial para el futuro de un país que lleva meses en conflicto.
Según los observadores de la OSCE, la jornada electoral se está desarrollando con tranquilidad aunque en algunas zonas controladas por los rebeldes la gente puede votar.
37 millones de ucranianos están llamados a renovar los cuatrocientos cincuenta asientos de la Rada Suprema.
Todos los sondeos otorgan una mayoría de votos al Bloque electoral del presidente Poroshenko. Una coalición de partidos y seguidores del movimiento Euromaidán.
“Creo que tendría que llegar otro partido político que cambie las cosas porque con este Parlamento es imposible”, decía un vecino de la ciudad oriental de Volnovakha.
“Lo que me ha hecho venir a votar es la situación que está viviendo el país. No es buena. Necesitamos un cambio y puede que venga alguien que lo facilite, que nos ayude. Está entre los candidatos y ya he tomado una decisión”,añadía otra.
Según el sistema electoral ucraniano, de los 450 escaños del Parlamento, la mitad se elige por la clásica lista de un partido y la otra mitad por candidatos individuales que pueden pertenecer o no a una formación política.
Este método complica el vaticionio del resultado. A las 20:00, hora central europea, se cierran los colegios electorales.
