Todo, o casi todo sobre Pedro Almodóvar. A sus 65 años y tras una veintena de películas, el director español asegura mantener intacta su pasión por el cine. Prefiere la complicidad del espectador a la polémica y reconoce que con su última comedia ha querido volver a sus años de juventud. Entrevistamos al cineasta unas horas antes de recibir el Premio Lumière en la ciudad francesa de Lyon.
María Piñeiro, euronews
Pedro Almodóvar, a lo largo de su carrera usted ha recibido los premios más importantes del cine, es el cineasta español más reconocido internacionalmente, es Doctor Honoris Causa por la Universidad de Harvard y cada uno de sus estrenos es un acontecimiento. Para muchos usted es un director de culto. ¿Se siente a gusto con esta consideración o es algo que le hace sentir incómodo?
Pedro Almodóvar, director de cine
Todos los reconocimientos en el momento en el que te los hacen son una gran alegría, es alguien que te está diciendo que te quiere y por lo tanto es algo que hay que agradecer. Pero cuando pasan, tanto las condecoraciones como los premios, la vida sigue exactamente igual. Yo me siento muy agradecido, creo que he tenido mucha suerte. No soñaba con tener un reconocimiento semejante. Pero al hacer una película o respecto al hecho de envejecer, los premios y las condecoraciones no sirven para nada. Tienes que enfrentarte cada vez a una aventura distinta y, por otra parte, eso también es lo excitante. Yo me siento con la misma pasión que cuando empecé a hacer cine y a la vez con la misma incertidumbre porque uno nunca sabe cómo va a resultar la película, el rodaje, etc…
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Usted ha sido actor y es director, guionista y productor. Controla el proceso creativo, de realización y de producción de sus películas. A alguien como usted que controla cada uno de los detalles de sus películas, ¿le sorprenden las polémicas que ellas provocan o es algo con lo que cuenta?
Pedro Almodóvar, director de cine
No cuento exactamente con ello pero sé que la polémica es una manifestación que implica también libertad por parte de la gente que va a ver una película. No es que sepa previamente que voy a provocar una determinada polémica pero, como me ha ocurrido desde la primera película que he hecho, ya estoy acostumbrado y, por lo tanto, no me sorprenden. De todos modos, no es exactamente la reacción que voy buscando. Yo prefiero, si tengo que elegir, la complicidad del espectador. Lo único que le pido a la gente que no está contenta con mi trabajo o que tiene algo que decir en contra, es que me den alguna explicación porque, lo que no me gusta, es que esa crítica se convierta en un exabrupto, en una descalificación sin más. Pero yo soy consciente del cine que hago y no puedo pretender que mis películas apasionen a todo el mundo por igual. La gente está viva y debe reaccionar como tal.
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Usted dice que se mueve con más facilidad con sus personajes femeninos, que con el papel de una madre, por ejemplo, se pueden abordar todos los géneros. ¿Por qué tiene esa relación tan especial con las mujeres? ¿Cómo consigue entrar tan fácilmente en su mundo ?
Pedro Almodóvar, director de cine
No hace falta ir a una universidad y estudiar algo específico para saber cómo es una mujer, basta simplemente con tener ojos, oídos y un poco de curiosidad. De todos modos, creo que esta sensibilidad respecto al universo femenino también se explica porque yo he sido educado por mujeres. Naturalmente, mi madre no tenía dinero, era la posguerra española, los niños íbamos a todas partes con nuestras madres y si no íbamos con ellas nos dejaban con las vecinas. Por ello, mis primeros recuerdos de la infancia son siempre rodeado de mujeres y, además, recuerdo perfectamente mis primeras experiencias que se basaban en escucharlas porque, para mí, la vida era escuchar lo que decían y que pertenecía a todos los géneros: al melodrama, al terror, a la comedia, al musical… Todas esas cosas ocurrían en los patios manchegos a la vista de un niño de cuatro años al que dejaban ahí. Yo no sabía que iba a ser director de cine pero ya estaba tomado notas mentalmente acerca de todo lo que ocurría a mi alrededor.
euronews
Usted ha dicho que con los hombres no es fácil hacer comedias, al menos para usted…
Pedro Almodóvar, director de cine
Es verdad. Creo que por el hecho de ser un hombre me resulta más difícil reírme o bromear sobre mis circunstancias que sobre las mujeres con las que tengo una cierta distancia. Además, los hombres como sujeto dramático son más aburridos. La mujer tiene un registro mucho más espontáneo y eso es muy bueno para la comedia.
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En los últimos años, en sus películas, ha habido más drama que tintes de comedia. Pero todo cambia con la llegada de su última película, “Los amantes pasajeros”, una comedia de los 80, una comedia con la que vuelve al tono de sus primeras películas. Dijo que con ella había querido rendir homenaje a esa época que le tocó vivir. ¿Por qué esa nostalgia en este momento?
Ped