Los kurdos en la ciudad siria de Kobani (también llamada Ain al-Arab, en árabe) quedaron abandonados en su propia ciudad natal. Quedaron abandonados porque quedaron en medio. En medio de las garras de los terroristas y de la ambición de poder. Poder que quisiera expandir Turquía a las regiones en Irak y Siria, de los kurdos.
Kurdos que con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK, por sus siglas en kurdo) han sido eternos rivales del Gobierno actual turco. Gobierno que hace unos días incluso bombardeó posiciones del PKK. Esta es toda la cadena que engarza y explica los sucesos que rodean Kobani, una ciudad que en los últimos días ha sorprendido con su fuerza, fuerzas de flaqueza para resistir a los terroristas.
Los kurdos están retomando el control de su propia ciudad natal. Ellos sin muchas armas han repelido a los terroristas del EIIL (Daesh, en árabe). El EIIL trata de regresar a la sangre, ante un Estados Unidos volador que desde el aire no es tan eficaz contra el terrorismo.
Conveniencias, ineficacias, mentiras y verdades, todos estos puntos los tocaremos en "Detrás de la Razón".
