En Guatemala inició el juicio por la quema de la embajada de España en 1980 donde murieron 34 campesinos, sin embargo sectores conservadores han iniciado una campaña de desprestigio hacia los familiares de las víctimas quienes califican la demanda de justicia como una "revancha". No obstante, los familiares de las víctimas rechazan esta acusación y aseguran que la exigencia de justicia no es un acto vengativo sino un derecho y una vía para cerrar heridas abiertas. teleSUR